10 de julio de 2006

24 HORAS DE PAJAREO INTENSO POR MI TIERRA

5 de julio, de 18:00 a 22:00 horas.

El pasado día 5 de julio tuve que acercarme a Zamora por temas familiares, que la verdad es que tampoco me afectaban directamente, pero era la excusa perfecta para visitar un par de lugares que estaba echando mucho de menos. Me presenté en casa a la hora de comer y a media tarde cogí prismáticos, telescopio y coolpix y fuí a realizar una visita que hago todos los años por las mismas fechas a un lugar llamado Timulos, un pequeño azud en el Duero, a la altura del término municipal de Toro.

Timulos, pequeño azud en el río Duero, Toro, Zamora, jul.06

El fin de mi visita año tras año, es la de comprobar si las garzas imperiales (Ardea purpurea) vuelven a críar aquí. Además es un sitio con una pequeña colonia de cigüeñas blancas (Ciconia ciconia), por desgracia, venida a menos, y con una interesantísima colonia de ardeidas, con nidos de Garza real (Ardea cinerea), Martinete común (Nycticorax nycticorax) y Garceta común (Egretta garzetta). Además aquí mismo también cría Avetorillo común (Ixobrychus minutus). Todo ello regado con la tranquilidad de las aguas del Duero (Padre Duero para nosotros, los zamoranos) y una luz de atardecer ¡impresionante!.

Martinete (Nycticorax nyctircorax), Timulos, Toro, Zamora, jul.06

Nada más llegar puedo observar que un adulto de Garza imperial sobrevuela el río varias veces aguas arriba, para a los pocos minutos hacer el camino contrario y bajar a pescar a las aguas someras por debajo del dique del azud, donde se junta con un grupo de cuatro garcetas comunes y varios martinetes. Preciosos los martinetes ¿verdad?. Es mi ardeida favorita con mucho, sobre todo porque es la primera que descubrí hace muchísimos años, en mis primeros paseos ornitológicos por la ribera del Duero en la capital zamorana, y que no era una garza real. Después de deleitarme con la pesquería de garzas, garcetas y martinetes, pasé a ver una colonia, de entre 80 y 100 nidos, de Avión zapador (Riparia riparia) que hay en una de las innumerables graveras a orillas del río, que hace que el paisaje esté lleno de cicatrices sobre el terreno. Además en esta gravera, parcialmente inundada, están criando dos parejas de cigüeñuelas (Himantopus himantopus) y al menos una de Chorlitejo chico (Charadrius dubius). Y para ir animando el cuerpecito de cara al postnupcial, los dos primeros andarríos grandes (Tringa ochropus) del verano, fieles a su cita de la primera semana de julio.

Garza imperial (Ardea purpurea), Timulos, Toro, Zamora, jul.06

Sobre el río no dejaban de pasar de arriba a abajo, milanos negros (Milvus migrans), aguiluchos laguneros (Circus aeroginosus) y cormoranes grandes (Phalacrocorax carbo); mientras que de una orilla a otra volaban los incansables rabilargos (Cyanopica cyanus), las oropéndolas (Oriolus oriolus) y familias enteras de mitos (Aegithalus caudatus). Observando el bicherío estaba cuando una pareja de garzas imperiales se posó enfrente de mí y tras unos instantes de cautela se adentraron en el carrizo. En su momento pensé, que efectivamente estaba críando una pareja en el mismo lugar de todos los años, pero gracias a dos buenos pajareros zamoranos, Alfredo Hernández Rodríguez y Vìctor Salvador, he sabido después que ¡hay varias parejas a lo largo del Duero, hasta casi la capital zamorana!, desde luego que si esto no es una especie en expansión... Hace años ver una imperial por Zamora era casi una pseudorareza. Cuando se constató su cría, fué una ilusión, y ahora resulta que crían varias parejas en todo el Duero... ¡que viva el Duero! y eso que está sufriendo como nunca debido a las dichosas graveras, a las playitas de turno y a lo que le arriman el hormigón; y aún así nos regala esos manjares llamados "Ribera del Duero", "Toro" o "Rueda"... Y observando pescar a las imperiales y a los martinetes se me hizo de noche y me volví para casa muy contento, y eso que solo había visto una pareja...

6 de julio, de 06:45 a 11:00 horas

El día 6 me pegué el madrugón y una vez más vi amanecer en mi amada Villafáfila. Cuando todavía no se veía con claridad, y la temperatura era de solo 11ºC, ya había contado todos los limícolas de la Laguna de Villarrín: un grupo de 23 agujas colinegras (Limosa limosa), 6 archibebes comunes (Tringa totanus), un combatiente (Phylomachus pugnax) y dos andarríos grandes (Tringa ochropus); además de las omnipresentes avefrías (Vanellus vanellus), cigüeñuelas (Himantopus himantopus) y avocetas (Recurvirostra avosetta), con sus pollos de varias edades.

Aguja colinegra (Limosa limosa), Laguna de Villarrín, RN. Lagunas de Villafáfila, Zamora. jul.06

De camino a la Salina Grande, la única que mantiene el nivel hídrico junto con la Laguna de Villarrín, Laguna de Paneras y parte de la Laguna de la Fuente, dos ojos frenaron mi marcha. La rapaz diurna con cara de búho advertía mi presencia pero no se inmutaba, el Águila culebrera (Circaetus gallicus). Es muy normal ver, si me pongo en plan bilbaíno, una de estas águilas por cada poste telefónico o eléctrico que hay en la reserva, pero como soy de Zamora, diré que es muy abundante en esta época, cuando adultos y jóvenes del año aprovechan la gran estepa castellana para ponerse moraos de lagartos y ofidios.

Culebrera europea (Circaetus gallicus), RN Lagunas de Villafáfila, Zamora, jul.06

Cuando llegué a la Salina Grande mis predicciones se hicieron realidad. Una gran cantidad de aves llenaban la laguna. Esto es debido a que como el resto esta seco, todas han tenido que mudarse a la Salina Grande y copan cada gota de agua. Cientos de pagazas piconegras (Sterna nilotica) con sus pollos, desde jóvenes que ya les siguen en vuelo de caza en busca de saltamontes sobre los rastrojos hasta pollos de apenas unos días. Decenas de gaviotas reidoras (Larus ridibundus) alimentando a sus pollos que las persiguen por toda la laguna. La alegría del año, una guardería gigante de tarros blancos (Tadorna tadorna) ya crecidos y en plan botellón, todos juntos apartados de los adultos. La alegría del día, una pareja de fumareles comunes (Chlidonias niger) alimentando a dos pollos; y digo la alegría porque no se tenían noticias de cría de fumarel común en Villafáfila desde los años ocheta. Y para que el corazón se alegre y tengamos un verano "pin pan do Brasil", un adulto de Gaviota cabecinegra (Larus melanocephalus) en plumaje nupcial, como manda los cánones por estas fechas. Tercera cita de esta especie para la provincia de Zamora, y despues de ver que habían críado de manera abundante los tarros blancos, y de manera menos abundante pero más importante los fumareles comunes, me puse a buscar pollos de gaviota cabecinegra como un loco, "de ilusiones vive el tonto los...", pues eso. A las 11 de la mañana con el sol calentando de lo lindo y 27ºC, me voy para casa.