Quizá, cuando a final de año hagamos balance, algunos pensemos en que el evento ornitológico del año ha sido la creación de las lagunas de Atapuerca. Han recondicionado una vieja laguna del s.XII y totalmente colmatada, en un pequeño complejo lagunar junto al archiconocido, por sus excavaciones paleontológicas, pueblo de Atapuerca. La superficie mide 16 hectáreas y está compuesta por cinco lagunas. Las obras han sido acometidas por la Confederación Hidrográfica del Duero, con el beneplácito del Ministerio de Medio Ambiente. Esta zona se conoce como Prado de la Laguna y la Dehesa y se alimentan hidrológicamente de las fuentes de la sierra de Atapuerca, además de servir para depurar las aguas residuales de la localidad mediante un proceso completamente natural a base de plantas acuáticas. La inversión realizada es de algo más de 750.000 € en dos años.
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Con estos antecedendes, me dispuse a visitarlas, por primera vez, el pasado 30 de mayo. Después de que se fueran produciendo citas interesantes y de que la gente comenzara a hablar de grullas, anátidas, gansos, limícolas, etc, decidí no posponerlo más y acercarme. Están a unos 20 km. de Burgos y a unos 30 de mi casa. ¡No hay excusas! Si bien, la época no es la mejor y habrá que esperar a ver como se comportan durante los pasos y la invernada. Pero mi primera impresión ha sido muy satisfactoria. Están diseñadas con bastante criterio. Tienen zonas de mayor profundidad para anátidas, prados encharcados en algunas de sus orillas, orillas muy tendidas para los limícolas y de diferentes profundidades. Además, están rodeadas de arroyos donde está empezando a crecer el carrizal. Hay dos observatorios que debieran estar orientados cada uno hacia un sitio y no de la misma manera para poder explotar tanto las luces de mañana, como de tarde. Este es el único pero que le encuentro. Se encuentran todas valladas en su perímetro, aunque esto no parece impedir que algunas personas entren hasta la orilla de las lagunas. Menos mal que en invierno no se acercará mucha gente por allí.
Ese día, 30 de mayo, pude contar nada menos que 5 especies de limícolas diferentes. Sí, ya se que algunos alucinaréis con un número tan bajo, pero para una provincia como Burgos con tal carencia de humedales dignos, es todo un orgullo y un lujo. Estas especies fueron: archibebe común (3), chorlitejo chico (varias parejas), chorlitejo grande (1), andarríos chico (1) y cigüeñuela común (3). Para que os hagáis una idea, apenas hay una decena de citas de chorlitejo grande en la provincia a lo largo de un año y la cigüeñuela no es un reproductor regular. ¿Entendéis ahora el motivo de mi enorme alegría? Además, azulones con crías y gallineta común. La verdad es que fue una visita muy corta así que repetí unos días después.
Lo hice el 5 de junio y este día con calma. Me acerqué una tarde de tormentas pero, cuando salía el sol y dejaba de llover, había una luz bastante decente. Esta vez fueron 6 especies de limícolas pero, además, con especies diferentes en gran parte a mi visita anterior: zarapito real (2), chorlitejo chico (6 pp.), cigüeñuela común (2pp.), archibebe común (1), aguja colinegra (24) y andarríos grande (9). Además, una pareja de críalos, una cigüeña blanca, un adulto de zampullín común con un pollo, una focha común, un rascón oído y los azulones... ¡El tema empieza a cobrar vida! Unas fotos de algo de lo observado el segundo día.
He depositado en este sitio grandes esperanzas y, supongo, a base de ser constantes en el lugar iran apareciendo cosas interesantes para la provincia. Lo malo es que yo solo no puedo ser todo lo regular que me gustaría y la gente por aquí no sale de sus "local patchs"... Seguiremos informando.
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